En el marco de los festejos por el 30º aniversario de la Facultad de Veterinaria (Fvet) en Paysandú, específicamente en la Estación Experimental Dr. Mario A. Cassinoni (EEMAC), el Laboratorio de Reproducción Animal será oficialmente nombrado “Dr. Alfredo Ferraris di Pernas”.

La actividad se llevará a cabo el viernes 17 de noviembre, previo al acto formal de celebración, con la presencia del homenajeado y su familia, el cuerpo docente de la Fvet en Paysandú, técnicos integrantes del Laboratorio “Miguel C. Rubino” y la comisión directiva del Centro Médico Veterinario de Paysandú (CMVP), así como sus socios.

Referente en lo académico, así como en lo humano

Luego de obtener el título de doctor en Medicina Veterinaria al inicio de la década de los 60, Alfredo Ferraris partió a Suecia a cursar estudios de posgrado en la Universidad de Uppsala y abrió las puertas para que muchos profesionales uruguayos de allí en más pudieran visitar este centro de alto nivel de formación.

En 1971, de vuelta en Uruguay, estuvo al frente del Área de Reproducción en la Dirección de Laboratorios Veterinarios (Dilave) de la ciudad de Pando, adonde puso en práctica muchas de las metodologías que aprendió en Europa​, sobre todo en revisación de vacas y toros e inseminación artificial (IA) en bovinos, y formó a muchos técnicos en ellas. “Fue un gran promotor de la inseminación artificial en vacunos en general, y de la instalación de los ‘circuitos’ de IA sobre todo en los grupos sistemas producción del sector lecheros de entonces”, manifestó uno de los responsables del Laboratorio de Reproducción Animal.

Otra vez en Paysandú, estrechó el vínculo y refrendó su apoyo con el Centro Médico Veterinario. Comenzó a dar clases a estudiantes de la carrera, que por entonces no tenían la posibilidad de cursar materias en nuestro departamento, y encausar en el libre ejercicio a jóvenes profesionales de nuestro medio.

Hacia 1985 los estudiantes plantearon desde Montevideo cursar el último tramo de su carrera en nuestra ciudad y dos años más tarde surgió el denominado “Plan Piloto Paysandú” de la Fvet (PlaPiPa), que posibilitó el asentamiento de actividades, recursos humanos y edilicios de esa facultad en la EEMAC. “Ferraris fue uno de los grandes impulsores de este plan, junto a otros integrantes del CMVP, y acompañó todo el proceso, porque al principio no era curricular”, recordó el también profesor del Departamento de Ovinos, Lanas y Caprinos de la Fvet, el Dr. (PhD) Julio Olivera, y exalumno del PlaPiPa. Años más tarde, en 1995, ganó una plaza como profesor en la cátedra de Clínica de Rumiantes y Suinos en Paysandú y pasó a integrar el cuerpo docente de la facultad. En 2013 retiró de la actividad laboral profesional y universitaria.

 “Ha sido un gran promotor del método de ‘enseñanza-aprendizaje en el medio’ y un gran maestro, no solamente en la academia sino en el orden personal, un maestro en la vida de muchos de nosotros”, señaló Olivera. Para los docentes de Veterinaria en Paysandú esta era la oportunidad de rendirle el primer homenaje, dándole su nombre al Laboratorio de Reproducción Animal, dada la estrecha vinculación del técnico con los temas de reproducción tanto en Uruguay como en América.

“Para nosotros es un gran gusto poder homenajearlo en vida y dar a conocer su trayectoria, se nos presentó esta oportunidad, que no siempre se da. Se lo consultamos y accedió”, indicó el doctor Olivera. Se espera que la actividad congregue a los veterinarios que han sido testigos del trabajo de este referente en el área. “Ese el espíritu de Ferraris, que el trabajo conjunto entre veterinarios y docentes no se debilite sino que trascienda el tiempo. Es nuestra responsabilidad el desafío de trasmitir y hacer perdurar su filosofía de trabajo”, agregó.

Sobre el laboratorio

El Laboratorio de Reproducción Animal fue puesto en funcionamiento en 2014, aunque la idea de su instalación surgió en 2012 a partir del establecimiento del Polo Agroalimentario Agroindustrial dentro de la EEMAC. “Se nos ocurrió que lo que era solo una sala de 36 m², podía ser utilizada por la Fvet y otros servicios si presentábamos una propuesta interesante”, evocó.

El proyecto recibió el apoyo de varios técnicos de la zona que estimaron importante las líneas de trabajo y los servicios que podía brindar a la profesión y al medio. Sin embargo, no fue sino hasta el 2015, con la incorporación de equipos tecnológicos, como el de análisis computarizado de semen (CASA), que el servicio efectivamente logró funcionar, producir y convertirse en gestor de varias líneas de trabajo.